, por supuesto, hubo drama.
Mi PAL Marta y yo decidimos sacarme a Dodge, ya que esta onda de calor es una de las peores de los más registrados. No hay signos de alivio. Entiendo la semana más o menos con este tipo de temperaturas. Es, después de todo, julio en Roma. Sin embargo, un mes completo de máximos en los años 90 y bajo 100s no es algo bueno.
¿Mencioné que no tengo aire acondicionado? No puedo mantener las ventanas abiertas por la noche, ya que mi bonita calle lateral está llena de estudiantes de High School Manipular demostrativos, y estudiantes de intercambio estadounidense ebrio hasta el amanecer.
Me estoy despertando a las 4:00 a.m., ya que es imposible dormir. Uno de mis clientes se inicia un importante proyecto de construcción esta semana, por lo que no puedo trabajar de forma remota en las montañas o en la playa, ya que algunos amigos han sugerido.
Todo esto para decir Marta y yo estábamos listos para salir de aquí el sábado, pero ay, Trenitalia tenía otros planes para nosotros.
Fue uno de esos clásicos solo en los momentos de Italia. El tren estaba a tiempo, pero luego se quedó atrapado en la pista a solo unos metros de la estación de Termini. Había algo malo con la corriente. No pudimos salir del tren ya que estábamos en las pistas. No había lugar para caminar con seguridad. Trabajaron en el tren y las pistas durante dos horas. Tenga en cuenta que el viaje en tren a Fondi es una hora más o menos.
Por fin, el tren regresa a la estación y eso es cuando todo el infierno se desató. Las personas no eran felices. Una mujer estaba saliendo de la policía. Pensé que si ella estuviera en los estados, probablemente la hubieran anulada, luego la arrestó.
Es gracioso, cuando estamos en el tren, las cosas estaban bastante tranquilas. Mientras había un poco de murmuración, “Ma Che Cazzo Sta Dicendo” (pero, ¿qué diablos está diciendo?) Cuando el conductor caminó por nuestro automóvil para darnos actualizaciones, las personas seguían leyendo o charlando con sus amigos en lugar de quejarse.
Tuvieron otro tren esperándonos, en una pista diferente, de inmediato. Los empleados de Trenitalia repartieron botellas de agua, que pensé que era un buen toque.
Finalmente, estábamos en camino. En lugar de esperar el autobús (en este momento, nos hemos muerto de hambre), saltamos en una mini furgoneta de taxi con varias otras mujeres que iban a Sperlonga. Habían estado en el mismo tren que nosotros. Cuando vimos la playa, comenzaron a aplaudir. Seguimos cracking porque el conductor estaba teniendo una conversación súper animada.
De una manera extraña, el tiempo funcionó mejor para nosotros. Llegamos a tiempo para el almuerzo. El restaurante, Scylla, estaba en el lado norte del centro histórico y queríamos estar en la playa del lado sur. Para escalar de un lado a otro no habría tenido sentido. Así que nos sentamos, teníamos un almuerzo encantador, y luego salvamos el sol para caminar hacia arriba y hacia el otro lado.
Todos estaban tomando fotos de este signo.
Olvidé todo sobre el comienzo de nuestro día una vez que llegamos.
Todavía pensando en este plato.
Sperlonga es una playa de bandera azul entre Roma y Nápoles.
Comenzando nuestra escalada de nuevo hasta el centro histórico. He escrito sobre las ruinas de Tiberius aquí. Es un excelente viaje de un día de Roma.
Un rápido aperitivo en la plaza principal antes de regresar a Roma. No quería dejar el aire fresco y la increíble brisa.
Fantástica señalización.
La vista desde la parada de autobús.
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